Ando buscando la inspiración pa poder volver a escribir en este blog.
Tengo varios intentos en borradores pero cada vez que los reviso no me convence lo escrito. La archiconocida y archirepetida intención de narrar una vida urbana al estilo Sex and The City no me interesa, salvo claro que me pusieran un departamento en el Upper East Side y un presupuesto pa ropa y carrete exactamente igual al de la Bradshaw... no, en realidad prefiero el loft the Petrovsky, harto más ondero que el piso de frustrado estilo Laura Ashley de Carry... pero si quiero ese presupuesto!!!
Las opiniones político-económicas y sociales también tienen una amplia oferta pero no se si tienen un amplio mercado. Además, creo que los chilenos no tenemos la capacidad de análisis político o ecocómico necesaria como para poder discutir esos temas... un taxista argentino nos puede dar clases sobre ellos... ah y no es porque seamos tontos... creo que en los colegios no nos forman para ese tipo de discusión, las universidades algo intentan, y, finalmente, a los propios políticos no les interesa ya que, a parte de la constante ingerencia de los periodistas especializados, pocos pero especializados, tendrían además, a la comunidad toda, al pueblo fiel, a la gallá, haciéndoles ver lo politiqueros y demagogos que pueden llegar a ser, o, para que nadie se ofenda, lo politiquero y demagógico que sus intervenciones pueden llegar a ser.
Se le acabó la pila al ipod asi que esperen mientras busco música.
Tabamos en ... en de qué hablar... bueno Homero, con sus intervenciones, ganó muchos adeptos, pero el wea me dejó más que sobreexpuesto. Ahi esta ahora, como esperando que deje el ibook solo para subirse a la silla y empezar a escribir. Me mira desde el sillón. Su sillón. Y cuando digo su sillón es porque mi tío tiene una conciencia y conocimiento absoluto de que en ese lugar se sienta, echa, duerme y rasca él. Solamente él. Basta que alguien llegue de visita y se le ocurra sentarse ahi para que él, lenta y tranquilamente, se suba en el más mínimo espacio que pueda encontar, haga un par de bramidos y se eche mostrando el culo a mi invitado. Ahora, si el invitado no es de su gusto den por hecho que más de un gas va a soltar.
Ya... mi vida... pero en realidad no se si mi vida ha tenido suficientes acotecimientos como para narrarlos. No, en realidad no se si quiero narrar los acontecimientos de mi vida, ya que de una u otra forma afectan o intervienen otras personas que, de seguro, prefieren la tranquilidad y anonimato de una apacible y tranquila vida al estilo de la sociedad judeo-cristiana occidental. Además, esta claro que mi vida no da pa un guión o una trama de novela o cuento, menos pa que preparen mi E! True Holliwood Story, ya que celebrity no soy.
Ya se. Voy a hablar de lo que se me ocurra. Convertiré este blog en un tributo, un homenaje, una loa a mi mismo. Como dice el Salmo, "me regocijaré" en mis ideas, por huevonas o falta de contenido que sean. Total, nadie espera un avalancha de intelectualidad o crítica meticulosa e informada. A nadie le interesa leer sobre mi vida como si fuera un reality. Pero de seguro a más de alguno le tincará husmear en las cosas que puedo decir, encontrará algo divertido o de pensamiento profundo, o sencillamente curioseará sobre las boludeces que se pueden escribir amparados en un relativo anonimato, gratuitamente, y sin la intervención de editores. Posiblemente ese alguien sea yo mismo en 10 años más.
Por último, lo haré por cultura. Sip. Por saber y conocer qué es lo que esta pasando a mi alrededor. Qué ocurre en este edificio, en esta cuadra, en esta ciudad, en la patria misma, en el mundo, porque definitivamente, y gracias a Facebook, nadie puede negar que "it´s a small world", que nuestro mundo is a small world. Gracias a esto, ya ni la modelo más desconectada puede decir que no sabe quien es Obama, que Michelle es un encanto de mujer pero que le esta entrando agua (y mucha) al bote, que, para bien o para mal, Piñera es la única opción para apretar bien los tornillos del sistema público, que los accidentes, cualquiera que sea, no ocurren sólo por falla de materiales, sino que son muchas veces fallas humanas, previsibles, evitables, y desgraciadamente, irresponsables, tanto en su ejecución como en quién pone la cara para repararlas.
En otras palabras, alguien, medianamente educado e instruido, ¿puede alegar o desconocer temas, tendencias, opiniones, discusiones...? Ya y si esa persona existiera, en este "nuestro" mundo, ¿puede negarse a conocerlas, estudiarlas, comentarlas...? ¿puede alguien permanecer indiferente a la evolución de las ideas, las artes, la musica, las relaciones personales, familiares, laborales, afectivas...?
Desde otro punto, alguien, cualquiera, ¿puede permanecer cerrado y aislado? ¿indiferente? ¿no interesado? La siguiente frase puede perfectamente usarse como estudio para ingresar a la masonería: ¿alguien puede evitar tener conocimiento de la evolución de inteligibilidad de las cosas?
Parece que el vino me inspiró (Sauvignon Blanc Reserva 2004 de Casa Silva, frio, lo recomiendo)
Me gustan las preguntas retóricas. Me hacen pensar que quien lee esto se interesará en la respuesta que el boludo que esta escribiendo pueda dar, por lo tanto, volverá a leer mi blog en algún momento de la vida.